Tuvo mala suerte en el amor, aquello la tenía sumida en una gran tristeza y no sabía como gestionarla. Todos opinaban y no hubo nadie que le ofreciese un brazo al que llorar, ni un sabio consejo.
Y la errará una y otra vez hasta que aprenda a diferenciar la mezquindad de alguna gente y eso otro que es totalmente opuesto.
Verónica O.M.