Preciosa imagen de internet cuento escrito por mi |
Nada más llegar al río, las chicas se quitaron la ropa quedándose en biquini.
El de María era de color negro con brillantitos, el de Yolanda de color rosa con diminutas florecitas. Los lucían espléndidamente.
Israel le dijo a Jeremy. -No me dijiste que nos íbamos a bañar, así que no me lo he traido.
-Chico, se me olvidó.
Las chicas lo escucharon y fue María quien dijo: -¡Pues quédate en ropa interior!
Y eso es lo hizo, se quedó en slip de color marrón, los ojos de María se dirigieron hacia sus atributos masculinos, Israel la miró, las mejillas de ella se arrebolaron tiñéndose de rojo.
Él sonrió, pensando que aquella tarde se atrevería a declararle sus sentimientos.
Autora Verónica O.M.
Continuará
Y otro capítulo más
JEREMY Y YOLANDA 23
Preciosa imagen de internet cuento escrito por mi |
Se metieron en el río...
Jeremy guiñó un ojo a Yolanda, los dos se apartaron un poco de sus amigos y a una distancia prudencial los observaban.
María estaba deseosa de tener algo con Israel, la chica estaba hecha un manojo de nervios, pero intentaba a toda costa disimularlo.
Israel deseaba tocar a María, estuvo dudando sin atreverse a ello, pero en arrebato... -María, me gustas.
Ella sintió una oleada de calor, aquello que tanto había deseado se estaba produciendo, sabía a la perfección que sus amigos habían mediado pero no le importó, muy al contrario, deseaba darles un fuerte abrazo y a Israel darle un beso de esos de película y hasta que quedasen sin aliento.
-También tu me gustas, es más, estoy segura de que te quiero.
Israel deseó apretarla en sus brazos y comérsela a besos, pero no sabía demasiado como debía hacerlo, no deseaba estropear nada de aquello que había nacido entre ambos.
María miró hacia dónde estaban sus amigos, parecía que estaban en sus cosas y sin pensárselo demasiado le plantó un beso en los labios, después echó a correr hacia el agua. Israel fue tras ella.
Por el rabillo del ojo, Yolanda no había perdido detalle de lo que había sucedido y muy flojito le dijo a Jeremy. -Ya se han besado. ¡Anda que no corren estos!
-Son almas gemelas, igual que nosotros, mi querida Yolanda.
Autora Verónica O.M.
Continuará