Un pañuelo rosa
tapa su cabecita
dónde el cabello
cayó del todo.
Siente miedo
pero de su boca
ni un lamento.
Se hace preguntas
¿porqué yo?
si nada malo hice?
Intuye el sufrimiento
de su familia
pero todos sonríen
con esa risa forzada
que suena a falsa.
Rezan en solitario
y las lágrimas
campan a sus anchas.
Se enfrentan
al mayor reto
de sus vidas
salvar a su niñita.
Verónica O.M.