Imagen de internet |
Cuanta más hambre
hay en el mundo,
el que más tiene
más poderoso se cree.
La desigualdad no está
tan solo, en tener o no tener
está en el corazón
que unos endurecen,
que miran para otra
parte para no ver.
Nadie te pide,
que de lo tuyo des
tan solo que no te quedes,
con lo que por ley
pertenece al más débil.
Verónica O.M.
Eso es lo malo, que no tienen sentimientos, ni entienden de leyes humanitarias.
ResponderEliminarBesos.
Muy buena entrada Verónica. Y cuánta razón tienes. Si por lo menos el poderoso no da, al menos que no siga sangrando y robando al más débil.
ResponderEliminarBesos.
Pienso que se han vuelto insensibles y solamente miran por ver sus cuentas cada vez más crecidas, no tienen nada ya que no poseen la sarisfacción de lo importante que se da gratis, besos!
ResponderEliminarSolidaridad, una materia que cuesta incorporar en los corazones, tendría que ser más atractiva, por ejemplo: experimentarla debería producir efectos más placenteros que la cocaína y el sexo, entonces el mundo sería diferente, puro amor!
ResponderEliminarTodas estas miserias Vero, me refiero a las humanas, lamentablemente las mayoría se percatan, únicamente en tiempos de crisis, pero la relaidad dice qiue eternamente existieron, las crisis sirven para ver al poderoso, aún más poderoso.
ResponderEliminarBuena entrada.
Un beso
Os contesto a todos (por falta de tiempo)
ResponderEliminarComparto totalmente vuestras opiniones, muchas gracias por dejarlas.
Besos, buen finde
Veronica! Un placer conocer tu blog, Gracias por compartir tan hermosas letras en esta entrada, Me encanto leerte, Si me lo permites me quedo por aqui leyendote, Bendiciones!
ResponderEliminarEs la lamentable ley del neoliberalismo: que los ricos coman pan, y los pobres de esa...UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarPara jackie
ResponderEliminarMuchas gracias Jackie por tus palabras, quédate por aquí cuanto gustes. Sigo tus blogs desde hace tiempo.
Besos, buen finde
Para Carlos Augusto Pereyra Martínez
ResponderEliminarPor desgracia es así Carlos, no es justo pero...
Buen domingo
Un abrazo