Bonita imagen de internet |
Un hombre, se acercaba a otro banco situado frente a ella, sus gafas oscuras no le dejaban ver sus ojos, pero estaba segura no le quitaba la vista de encima.
La tenía intrigada...
Y como ya nada tenía que perder, se levantó dirigiéndose hacia él. -¡Buen día! -dijo.
-¡Buen día nos de Dios!
-¿Me podría decir la hora que es?
-No llevo reloj. ¡Soy ciego!
Se quedó sin habla. Ahora entendía...
Autora Verónica O.M.
Quizás la "mire" a partir de ahora que la escuchó, besos!
ResponderEliminarAh pues!!! Pero ustedes los hombres tienen la culpa por ser como son. jeje :) Gracias por compartir tan interesante relato. Bendiciones!!!
ResponderEliminarPuede que entablen una buena amistad, cuando vuelvan a verse seguro que se saludan y el señor con las gafas oscuras sabiendo que la encontrará de nuevo en el parque habrá cogido su reloj para poder decirle la hora (hay relojes especiales para invidentes).
ResponderEliminarMe ha encantado este escenario, este momento cotidiano con su inesperada sorpresa .
Un besote Vero!!!
Si no le pregunta se queda con la duda...hizo bien en preguntar, quiero pensar que entablaron una amistad.
ResponderEliminarUn abrazo Vero
Y ella un poco asustada. Y casos de estos se dan de verdad.
ResponderEliminarBesos Verónica.
Muchas gracias a tod@s, pido disculpas por no contestaros individualmente (falta de tiempo)
ResponderEliminarYa ves Vero! y ella pensando de más... A veces somos más mal pensados. Bonito lo que has escrito. Un beso.
ResponderEliminarUn abrazo amiga, no se sí salen los comentarios.
ResponderEliminarUNa buena lección de vida. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarMuchas gracias a tod@s
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