Simpática imagen de internet |
-Qué extraño, no hay nadie. Seguro me lo he imaginado.
Echó nuevamente a andar y volvió a escucharla a su espalda. Detuvo sus pasos de nuevo y volvió otra vez la cabeza.
-No hay nadie -se dijo asustada.
Y echó a correr hasta llegar a su casa.
Una vez dentro cerró la puerta con llave y desde una de las ventanas fisgó la calle. En ella no se veía ni un alma.
-Alejandra.
Volvió nuevamente a escuchar. Del susto sintió cómo un líquido caliente mojaba sus pies.
Autora Verónica O.M.
Un micro de miedo para empezar el mes, jaja
ResponderEliminarHay pobre que mal lo pasa, peor aun cuando ve quien le llama.
ResponderEliminarBesos.
Es cierto, amiga.
EliminarO quizás no vea.
Besos
Mucho miedo, a lo mejor es su interior, besines!
ResponderEliminarJaja, mejor no encontrarse en esa situación.
EliminarPodría serlo, porque no...
Besos
O sea, que se meo....
ResponderEliminarBss
Verónica... Realmente las voces del mas allá, asustan, ha mirado que no fuera del teléfono móvil abierto alguien que la llamara...
ResponderEliminarUn abrazo...
Y tanto que si!!! De miedo y del bueno. La cosa no es para menos, eso de que te llamen y no sea nadie es para hacerse un pis.
ResponderEliminarLa pobre!!!
Besos!!!
;D
Ya me estás metiendo el miedo en el cuerpo.
ResponderEliminarBesos Verónica.