-Qué asco me doy en estos momentos. Juré y juré que dejaría de tomar alcohol y no me tengo en pie. Si me viera mi difunta me cogería por la orejas y me haría jurar por su vida que nunca más. Ah, seguro que le juré y no cumplí. Soy un asqueroso borracho, hip, hip...
Verónica O.M.
Una enfermedad muy lamentable, con tres puertas abiertas: enfermedad, cárcel o rehabilitación.
ResponderEliminarUn beso. Feliz semana, Vero.
Reconocerlo ya es un paso adelante para poder dejarlo si se lo propone ...
ResponderEliminaruy uy menuda cogorza, jajajajaja Seguro que juró y mojó el juramento en ese vino que tanto le gusta :D
ResponderEliminarBesos!!!
Que descansada se quedó la difunta.
ResponderEliminarBesos.
Menos mal que lo reconoce. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarY si uno no cambia, conforme va cumpliendo años, cada vez menos. Así que si le gusta, darle a la priva, lo seguirá haciendo.
ResponderEliminarBesos Verónica.
Unos de los defectos del ser humano es reconocer que tiene un problema. Vero, buen inicio de semana. Besos.
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