Lo peor de todo es que al principio esas mujeres se sienten bien porque piensan que es amor lo que les entrega el maltratador. Pero con el tiempo, se dan cuenta que están metidas en una jaula, que no es precisamente de oro, sino de hojalata, que coarta sus pensamientos, su autoestima y sobre todo su identidad, dejan de ser personas, mujeres con ideas propias. Se convierten marionetas. Pero más vale tarde que nunca... para salir de ese torbellino en el que envuelven los maltratadores a sus víctimas, haciéndolas culpables de las debilidades de ellos. Un abrazo Verónica.
La letras tienen el poder de llevarte a ese mundo dónde todo es posible, deseo te gusten las mias. Gracias por tu visita, comentario y parte de tu tiempo 💙❤️
Me ha gustado tu post. Es muy expresivo.
ResponderEliminarPara Amapola Azzul
EliminarMe alegra te guste, mil gracias.
Besos
Cierto, lo malo es que no te dejan ni respirar a gusto, besos!
ResponderEliminarPara silvo
EliminarLo malo, es eso que mencionas entre otras muchas cosas.
Besos
Piasarlo el cuello¡
ResponderEliminarBss ( qué bruta soy...pero)
Para MAR
EliminarSe lo merece, Mar. Aunque nosotr@s somos más pacíficas.
Besos
Si no fuésemos tan pacíficas,otro gallo cantaría...
EliminarY de tanto repetirte las mismas mentiras terminas creyendote todas esas cosas que te dice.
ResponderEliminarTriste pensar que haya personas así todavía...
Besos :)
Para Nieves
ResponderEliminarSuele ocurrir como bien dices, Nieves.
Por desgracia ese tipo de personas las hay.
Besos
Lamentablemente el maltrato es cada vez máas frecuente.
ResponderEliminarLo peor de todo es que al principio esas mujeres se sienten bien porque piensan que es amor lo que les entrega el maltratador. Pero con el tiempo, se dan cuenta que están metidas en una jaula, que no es precisamente de oro, sino de hojalata, que coarta sus pensamientos, su autoestima y sobre todo su identidad, dejan de ser personas, mujeres con ideas propias. Se convierten marionetas. Pero más vale tarde que nunca... para salir de ese torbellino en el que envuelven los maltratadores a sus víctimas, haciéndolas culpables de las debilidades de ellos. Un abrazo Verónica.
ResponderEliminar