El hombre no podía dar crédito a lo que sus ojos veían, la mujer de la que había estado siempre enamorado la tenía a unos metros de distancia. Seguía igual que antaño aunque su vestimenta era muy actual.
Pero habían pasado cincuenta años desde que la vio por última vez. Ni pensó que quello era imposible.
Verónica O.M.
Y yo os pregunto...
¿Quien puede ser esa mujer?
Vamos....
No me extraña, me temo que se encontró con algo que salió mal sin tener por qué, Me encanta este relato, besines!
ResponderEliminarEsta mujer podrìa ser una ilusiòn del pasado que nunca fuè, pero que ahora con el correr del tiempo, renueva un amanecer tomados de la mano bajo la celosa luna . .
ResponderEliminarMe encantò
Abrazos Verònica!
Yo había pensado ... será su madre !?
ResponderEliminarPara mi hay dos opciones...
ResponderEliminaruna que sea un espectro, un ente o fantasma
y la otra mucho más terrenal que tenga mas operaciones que la presley
jajajaja
Mil besos
Joder, que rabia... no se me ocurre quien puede ser.
ResponderEliminarBueno, ya lo dirás.
Besos.
Muchas gracias a tod@s.
ResponderEliminarAtentos al siguiente post.
Buen finde
Hola Verónica... Esa mujer, sera por supuesto quien el quiera que sea... la ilusión, la imaginación, la realidad, que mas da...
ResponderEliminarUn abrazo....
Pues por mucho que se conozca a una persona; no sé yo, si cincuenta años después, caería en la cuenta.
ResponderEliminarBesos Verónica.