Alguien golpeó la puerta de forma insistente...
-¡Qué extraño! Pensó la mujer. Ya nadie lo hacía de esa forma, y si, llamar al timbre.
Miró por la mirilla y no vió a nadie y escuchó a través de la misma y no percibió ningún sonido.
De nuevo aquellos golpes la sobresaltaron.
Sigilosamente volvió a mirar y tampoco había nadie. Ahora ya se preocupó. Al parecer alguien intentaba asustarla.
Deprisa 🏃 bajó las persianas y cerró las ventanas y se dirigió hacia el teléfono para llamar a la Policía.
Autora Verónica O.M.
Qué inquietante...
ResponderEliminarNo sé si vendrá la policía.
No creo...
Va a tener que abrir, glups...
Besos.
Con el susto que lleva no sale en todo el día.
EliminarBesos
Los ladrones no llaman a la puerta y los fantasmas no hacen ruido. Vaya suspense. Abrazos
ResponderEliminarNo había caído en eso, Ester, y la mujer tampoco. Gran aportación.
EliminarAbrazos 🌹 🌸
Sin duda es inquietante sobre todo por la insistencia de llamar a la puerta.
ResponderEliminarQue misterio nos ofreces Vero
:) Besos
Supongo nos inquietaria a una gran mayoría, a mi por supuestisimo, ja,ja.
EliminarBesos 🌸 🌷
Yo creo que era alguien que pedía ayuda y al no abrir la puerta se marcho , esto tiene pinta de expediente x , te deseo una feliz mañana besos de flor .
ResponderEliminarPodría serlo perfectamente, Flor.
EliminarPudo tardar un rato en mirar...
Besos 🌸 🌹
Sí que es extraño.
ResponderEliminarCrea inquietud.
Un beso
A mi me la crearía también.
EliminarUn beso 🌸 💐
Algo me hace pensar que esa señora es un poquitin nerviosa no????
ResponderEliminarCariños y buen fin de semana
Ese mal tiene muchos adeptos.
EliminarBesos 🌹 buen finde, Abu.
De chicos, nos encantaba tocar la puerta de una casa, que tenía una mano de bronce en la puerta, muy bonita, tocaba muy fuerte y corríamos a escondernos para ver a la señora salir y enojarse. Lo hicimos nuestro deporte... Hasta que nos identificó y lo informó en nuestras casas, ya te imaginarás el mega regaño de mamá y papá, jajaja. Después lo volvíamos a hacer. Pero entonces, alguno de nosotros se esperaba en la puerta... cuando salía la señora le decíamos, "aquellos, señora, aquellos, no entienden, son unos bárbaros, ahora mismo les digo a sus papás", jajaja. Entonces hoy me llevo muy bien con los chiquitos del barrio por si acaso.
ResponderEliminarBesos.
Ja,ja, Menudos pillos érais, me ha hecho mucha gracia. A la señora por supuestisimo le haría menos.
EliminarA ver si en este caso ocurre algo parecido y la culpa es de la mirilla que no alcanza lo suficiente? Todo es probable, ja,ja.
Besos 🌸 🌼 buen finde
Hola Vero, pues la pobre mujer, no creo que abra la puerta durante todo el día, los golpes le han hecho pensar. Y tu también nos has hecho pensar.
ResponderEliminarBesitos!!!
Tienes toda la razón, Cristina.
EliminarMe alegra tu vuelta.
Besos 🌹 🌸
Bueno, nos dejas en vilo para que especulemos...Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarLa mujer también lo está.
EliminarUn abrazo
Hola Verónica.. No sera que el que llamaba era muy bajito y quedaba por debajo de la mirilla de la puerta, y la mujer no llegaba a verlo,como no habría la puerta el insistía..jeje.
ResponderEliminarUn abrazo..
Hola Llorenç, podría serlo perfectamente, ja,ja.
EliminarUn abrazo
Algún bromista desocupado, creo yo, no hallo otra explicación.
ResponderEliminarUn abrazo.
Podría serlo perfectamente, Rafael, hay personas que dedican el tiempo a este tipo de cosas.
EliminarUn abrazo
Hola Vero, pues yo dejando aparte a fantasmas, y según están las cosas pienso que querían saber si había alguien para hacer el truco de robar, hay veces que te dicen que son del gas, o de la luz, pero estos tenían mucha prisa, querrían poner nerviosa a la dueña, y menos mal que tuvo la buena idea de bajar persianas y llamar a la policia, y lo mejor aún no salir. Un beso amiga.
ResponderEliminarEs cierto, Lola, por aquí sucede también lo que explicas.
EliminarSer prudente en ese sentido y en otros también nos puede evitar sustos innecesarios.
Besos, amiga 🌹
Habràn sido los hijos del vecino, que en todo quieren estar . . . je je; )
ResponderEliminarAbrazos!