Preciosa imagen de internet |
Al recordarlo sintió un escalofrío, el vello rubito de su cuerpo se erizó, igual o parecido a cuando sentía algo de frío.
No sabía si aquello era normal, ni tampoco el hecho de haberle confesado que lo quería. Ella misma se daba cuenta que no era lo lógico, ya que era una niña de apenas diez años.
Pero aquella confesión le salió sola, casi sin pensarlo.
Sus deditos de vez en cuando, los llevaba hacia sus labios, y en ellos depositaba inocentes besos.
Mientras tanto Jeremy tampoco dormía, no podía hacerlo ya que estaba muy nervioso.
No sabía si había hecho bien o no, besando a su amiguita, pero no pudo remediarlo. Se daba cuenta que aquello no era demasiado normal, apenas tenía doce años, y comprendía que los niños no piensan en esas cosas, pero si en jugar, y pasarlo bien.
Cuando se levantó, tenía unas ojeras impresionantes, su madre fue la primera que lo advirtió.
-¿Jeremy, te encuentras bien? llevas unas ojeras, que te llegan hasta el suelo.
El niño nunca decía mentiras, pero esta vez si lo hizo ya que su madre le estaría preguntando, hasta que se enterase.
-¡Me dolía la barriga!
-¿Y como no me avisaste? podía haberte preparado una manzanilla.
-¡No quise despertarte!
-¡Si otra vez te pasa, me despiertas!
-¿Ya te encuentras bien?
-¡Si, no te preocupes!
La madre de Yolanda, entró en la habitación para despertarla, ya que debía ir al colegio.
-¡Yolanda hija, despierta!
-¡Ya voy, pero tengo mucho sueño!
-¡Hija, si hace horas que duermes!
-Es verdad mama, ahora me levanto.
-¿Tu crees, que soy bonita mama?
-¡Vaya preguntitas a estas horas! pues claro que eres bonita, eres más que eso, eres preciosa.
-¿Porqué me preguntas eso, y a estas horas?
-¡Por nada, mama!
-¡Anda tunanta levántate!, mientras te preparo el desayuno.
Verónica
Continuará
Hola guapa , me gusta mucho a ver como termina , la serie de adolescentes , besitos de Flor.
ResponderEliminarQue lindo entrar en los pensamientos infantiles, seguro que aprendemos. Un abrazo
ResponderEliminarEn esos primeros escarceos amorosos, hasta a los padres se les oculta, por vergüenza.
ResponderEliminarBesos Verónica.
Espero la continuación con ganas de saber como sigue la historia de estos dos preadolescentes.
ResponderEliminarAbrazos.
Muchas gracias a tod@s.
ResponderEliminarBesos
El enamoramiento muy poco tiempo se puede ocultar.,. Se nota demasiado, sobre todo en esa edad, que de desastrosos desarreglados de un día para otro se empiezan a acicalar para salir, la cara de bobos y con sonrisa de oreja a oreja, jajaja.
ResponderEliminarBesos. Feliz finde!
Que bonito, un beso
ResponderEliminarComo van quemando etapas , lastima ver sus dias complejos en una edad de colores y risas
ResponderEliminarCariños y buena semana
En estas edades todavía se ve la inocencia, de su temprana edad.
ResponderEliminarVero, besitos!!!
Gracias a tod@s.
ResponderEliminarBesos
SE muestra el rostro de Jeremy, een lo característico de las adolescentes: la intriga de si son bonitas. Un abrazo
ResponderEliminarGracias, Carlos.
ResponderEliminarUn abrazo