Simpática imagen de Internet |
La vidente entró de nuevo en la consulta, se sentó de nuevo enfrente de Maite y la miró con semblante serio.
-Me temo que no cree en lo que le digo.
-No demasiado, la verdad.
-Le voy a dar una prueba.
Dicho esto giró la cara hacía la puerta y se dispuso a...
-¡Rabioso, ven y trae al espíritu!
El gato enseñó a Manuel sus afiladas uñas, y no le quedó más remedio que entrar dónde el felino le obligaba.
-¡Rabioso, ven!
El gato se acercó al lado de su dueña.
-¡Mírele las uñas con atención!
Maite las miró sin comprender absolutamente nada, y escuchó a la vidente decirle al gato.
-¡Peléa con él!
El gato se le tiró encima y le arañó por todas partes y con gran brutalidad.
Manuel permanecía acojonado y no se atrevía ni a moverse.
Mientras tanto Maite no entendía lo que allí sucedía, ya que el gato parecía haberse vuelto loco.
-¡Rabioso, enséñale a esta señora las uñas!
El gato se acercó a ella, y cual fue su asombro al ver que no le quedaba ni una en condiciones.
-Él solo no puede hacerse eso si no es peleando con alguien.
Maite comprendió que aquello era cierto, y se le erizó el vello pensando que el espíritu de Manuel era el que estaba ocasionando todos sus problemas.
Autora Verónica O.M.
Continuará
Oh, Vero... encontraste muy buen recurso comprobatorio, con las uñas del gato :)
ResponderEliminarBesos. 🌼
Ja,ja, había que demostrarle a Maite que la vidente decía la verdad.
EliminarBesos🌷🍀
Jodido se le está poniendo el tema al espíritu con el jodido gato, jajaja. Yo ya le había dado dos puñetazos en las orejas.
ResponderEliminarBesos Verónica.
Te detectarla las intenciones, ja,ja, ya te veo corriendo como Manuel.
EliminarBesos
Buena prueba.
ResponderEliminarDifícil escapatoria para el espíritu.
Besos
La prueba ha convencido a Maite, ja,ja.
EliminarBesos 🌷🍀